Abstract: Este trabajo estima el efecto de las restricciones vehiculares temporales aplicadas al 20% de los automóviles en Santiago de Chile, sobre los flujos vehiculares. Usando como proxy del flujo vehicular datos de alta frecuencia de CO en las estaciones de monitoreo, encuentro que la concentración horaria de monóxido de carbono, que proviene principalmente de las emisiones de los autos, disminuye
aproximadamente un 13 %. Estos efectos indican una gran efectividad potencial de las restricciones vehiculares temporales en reducir el flujo vehicular. Por su parte, y en línea con la teoría económica, la evidencia sobre las estaciones individuales sugiere una variación en la respuesta a las restricciones de acuerdo al número de automóviles disponibles por hogar y el acceso al transporte público. A su
vez, encuentro una menor sensibilidad en la respuesta a las RV frente a un cambio de la política de transporte público que se implementó en Santiago en 2007, y que aumentó el costo relativo de ´este.