Efectos de la información sobre resultados educativos en los votantes: investigación de Francisco Gallego

25 de Junio 2024

El profesor Titular UC y académico del Instituto de Economía comparte detalles de su investigación “Punishing Mayors Who Fail the Test: How Do Voters Respond to Information about Educational Outcomes?”, que explora cómo los votantes reaccionan ante la información sobre los resultados educativos de sus municipios.

En un esfuerzo por entender mejor la influencia de la información sobre el desempeño educativo en las decisiones de los votantes, el profesor Francisco Gallego, junto con otros investigadores, realizó un experimento en Chile que involucró el envío de cartas a más de 128.000 votantes. El académico explica en esta nota las motivaciones detrás de la investigación, las dificultades encontradas en su implementación y las implicancias de los hallazgos para futuras campañas electorales.

¿Qué te motivó, junto con los otros autores, a realizar esta investigación?

Nos motivó la necesidad de entender mejor cómo los votantes reaccionan a la información sobre el desempeño de los gobiernos locales, específicamente en el ámbito educativo. La literatura hasta nuestro paper no había mirado con detalle y de modo experimental si la entrega de información en resultados educativos afectaba las decisiones de votación de las personas y de qué manera lo hacía. La literatura estaba muy enfocada en temas de corrupción e “insumos”. 

Además, mi investigación previa también documenta que existe una falta de información importante entre las personas sobre los resultados educativos incluso de sus hijas e hijos y eso afecta fuertemente los resultados educativos. La sospecha es que era aún más fuerte en la ciudadanía sobre los resultados de las escuelas públicas. Entonces había una brecha en la literatura que esta investigación trató de cerrar. 

Así, queríamos explorar si proporcionar esta información podía influir en el comportamiento electoral, especialmente en un contexto donde las municipalidades tenían una influencia significativa en la gestión de las escuelas municipales. Además, había preguntas también sobre cómo entregar información: qué destacar, contra qué grupo comparar, etc. que son relevantes para entender mecanismos y así aportar al conocimiento científico y también al estudio de la rendición de cuentas en democracias emergentes y consolidadas, como la de Chile, y así aportar lecciones sobre la interacción entre información y comportamiento electoral.

¿Cuáles fueron las principales dificultades que encontraron al diseñar e implementar el experimento del envío de cartas a los votantes?

Hay dos planos de dificultades. Una sustantiva: quienes operan en el mundo político son reticentes a que la gente que vota conozca este tipo de información con detalles. Nuestro paper usó un tipo de intervención estándar en la literatura, tuvo aprobaciones de dos comités de ética (de MIT y de la UC) y era una intervención que sólo usaba información pública que se ordenaba y se entregaba de modo más simple a quienes votaban. Este sólo hecho provocó reclamos de gente del mundo involucrada en las elecciones. Esto muestra lo relevante que es esta entrega de información y las barreras, o fallas de mercado en lenguaje de economía, para que esta información fluya y se entregue de modo adecuado a quienes votan. Pero bueno, para eso está la academia con su independencia, para investigar y proveer resultados relevantes aún cuando alguna gente se moleste.

Hay un segundo plano de dificultades más de implementación que tienen que ver con que fue un experimento muy grande con casi 130.000 personas intervenidas en 59 comunas. También tuvimos que diseñar mensajes que fueran claros y comprensibles para todos los niveles de educación y que motivara una respuesta sin inducir sesgos. Para ello, tuvimos que realizar pruebas piloto para asegurarnos de que el contenido de las cartas fuera efectivo y comprendido por los destinatarios. El manejo de datos precisos y actualizados de los registros electorales también fueron aspectos complicados del proceso. 

Finalmente, que las cartas, casi 130.000 cartas, fueron impresas (notar que eran diferentes por comuna y por tipo de tratamiento además) y llegaran a los destinatarios correctos a tiempo en un contexto “realista” (o sea usando correos de Chile). Pero lo interesante es que lo logramos.

Los hallazgos indican que los votantes responden más fuertemente a los malos resultados educativos. ¿Podrías profundizar en cómo esta reacción podría influir en futuras estrategias de campaña de los candidatos a alcaldes?

Lo que muestra este resultado es que la gente reacciona asimétricamente: o sea reacciona más a malas noticias que a buenas noticias. Eso tiene dos lados: por un lado implica que quienes son incumbentes tienden a tener incentivos para mejorar el desempeño educativo de las escuelas que manejan en sus comunas y evitar “catástrofes” (o sea que les vaya muy mal). Esto también pone incentivos a candidaturas que desafían a quienes son incumbentes a dar a conocer esta información de modo simple a quienes votan. Pero nuestro resultado también tiene un “lado oscuro”, que parece que la gente que vota no premia demasiado a desempeños normales o sobresalientes de incumbentes. Es un resultado que ya ha aparecido antes en la investigación previa. Esto también tiene implicancias sobre las campañas.

Lee la investigación aquí.