En un régimen democrático los gobernantes deben competir para mantenerse en el poder o —al menos— para que los suceda alguno de sus correligionarios. Ganar esa competencia es un incentivo po-deroso para recurrir al uso de instrumentos económicos que influencien oportuna y favorablemente al electorado. La teoría del Ciclo Político Económico (CPE) predice que los gobiernos utilizarán la política monetaria, fiscal y cambiaria para mejorar las condiciones económicas en el período anterior a las elecciones y, de este modo, obtener más votos.