Investigación de Tomás Rau analiza el impacto de los profesores en la brecha de género en pruebas estandarizadas

El director del Instituto de Economía UC, Tomás Rau, publicó un nuevo Documento de Trabajo titulado “Teacher Value-Added and the Test Score Gender Gap”, donde analiza el impacto de los profesores en las brechas de género en pruebas estandarizadas en Chile. El estudio -que fue aceptado para publicación en la revista “Labour Economics”- utiliza datos administrativos del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación (SIMCE), encuentra que los profesores explican una parte significativa de la brecha de género en matemáticas, pero no en lectura.

A grandes rasgos, ¿en qué consiste tu investigación y cómo la llevaste a cabo?

Las brechas de género en pruebas estandarizadas se generan a temprana edad. En general se le ha puesto más foco a las de matemáticas por cuanto las carreras asociadas a las matemáticas (STEM) tienen sueldos más altos y en Chile las mujeres están subrepresentadas en dichas áreas. Mientras que solo el 20% de los graduados en STEM en Chile son mujeres, el promedio en la OCDE es el 39%. Así, la brecha salarial de género tiene un correlato con brechas que se generan (y aumentan) en el ciclo educativo.

Luego, nuestra investigación analiza las diferencias de género en pruebas estandarizadas y el impacto de los profesores en estas diferencias. Usamos datos administrativos de Chile (SIMCE), calculando el valor agregado (VA) de los docentes por género mediante el estimador de Chetty et al. (2014), que ha sido destacado por la literatura por sus propiedades estadísticas como bajo sesgo de predicción y ser robusto a sesgos de asignación profesores-alumnos.

¿Cuáles fueron los principales hallazgos?

Encontramos importantes brechas en estudiantes de 6to básico en Chile. En lectura, las mujeres tienen un rendimiento mayor que el de los hombres en 0,21 desviaciones estándar. El VA de los profesores explica el 7.1% de la brecha de género. En matemáticas, la brecha de género es de 0.07 desviaciones estándar en favor de los hombres y el VA de los profesores reduce la brecha de género en un 16.9%. Otros resultados indican que la brecha en matemáticas es menor con docentes mujeres y que la educación materna está asociada con menores brechas en la sala de clases, cuanto más alta es su educación.

Por último, analizamos si el efecto de los profesores (VA) en las brechas de género se manifiesta dentro de la sala de clases o entre salas de clases (que podría darse si por ejemplo los hombres tienen mejores profesores de matemáticas en desmedro de las mujeres) y encontramos que se manifiesta dentro de la sala de clases y no entre clases. Hay evidencia para Chile de que un efecto de “modelos de rol” podrían estar detrás de los resultados que se dan dentro de una sala clase en lugar de los sesgos de género.

¿Qué recomendaciones o estrategias podrían implementarse?

Basados en estos resultados, varios ya reportados en otros estudios, algunos autores han planteado que podría estudiarse una reasignación de docentes, es decir, redistribuir docentes según su efectividad con cada género. Otra estrategia es impulsar la presencia de mujeres en áreas STEM lo que puede reforzar el efecto “modelo de rol” en el rendimiento de las mujeres en matemáticas. Por último deberíamos pensar en intervenciones tempranas, por ejemplo programas que refuercen las habilidades matemáticas desde los primeros años del ciclo escolar o incluso pre-escolar.

Sin duda que debemos seguir estudiando este tema porque no tenemos aún todas las respuestas. Creo que las universidades pueden generar un impacto significativo al investigar y proponer políticas educativas basadas en evidencia, y nuestra Facultad está siendo muy activa en esta materia.

Lee el documento de trabajo completo aquí.